sábado, 29 de octubre de 2011

EN ESPAÑA EMPEZO A AMANECER




Y la parte sana de España se rebeló contra el Todo corrupto y alumbró un porvenir de justicia social y unión entre los españoles. Tal día como hoy los españoles de bien dieron forma al verdadero movimiento redentor de España; sirva como homenaje.

domingo, 23 de octubre de 2011

LA SANGRE VERTIDA POR ESPAÑA



Francisco de Cossío visita a los falangistas acantonados en Quijorna, pueblo situado entre Brunete y Navalagamella. Los jóvenes portadores de la camisa azul no se resignan a permanecer estáticos en su posición que hasta el momento permanece tranquila y añoran pasar a un frente más activo. Entre aquellos falangistas se hallaba un hijo del autor, compartiendo camaradería con el resto de jóvenes principalmente burgaleses y vallisoletanos y, aquel escenario tranquilo se convirtió a las pocas horas de que Cossío abandonara el pueblo en un verdadero infierno y a aquellos falangistas les tocó en suerte contener una gran avalancha. Que sea ahora el autor el que continúe el relato:

"...De los que almorzaron conmigo entre cuentos y risas y canciones, no he podido abrazar sino a uno, a Goyo Sáez, herido y evacuado. Los demás quedaron allí. Allí Pepe Cruz, que era como el humorista de la centuria. Había sido cartero y todos conocían a pepe Cruz. los que cruzaban con él le golpeaban la espalda al pasar, y él, con una cachava de pastor, se daba cierta importancia de jefe, pero siempre con ese tono efusivo del organizador. Cayó Pérez Díaz, rubio, casi rojo, con ojos muy vivos, también bromista y alegre, que durante la comida toma dos refrescos de limón. Es la sed de un día de parapeto, concentrada allí, en el gran vaso turbio, que el apura como una bebida de dioses. Severino Velasco, siempre al lado de mi hijo, también vivo, ágil, decidor... Mi hijo le ha hecho una caricatura que ha enviado a su padre, el alcalde de San Miguel de Arroyo. ¡Cómo llega a mí hoy el recuerdo de estos muchachos, todos ellos, en un instante, ofrecidos íntegramente a España! En cuanto llegamos y preguntamos por él, todos le conocían, y se oyeron gritos por las calles pendientes, por los portales oscuros, por los pasadizos en penumbra...-¡Manolo! ¡Manolo!.

Murió como correspondía a su entusiasmo, a su fe, a su generosidad. En el sillín de su ametralladora y con un tiro en el pecho, cerca del corazón. A su lado, Gregorio Sanz, el servidor de su máquina, no sólo recogió su cuerpo antes de morir, sino su silueta moral. Cierra los puños cuando lo cuenta y se le llenan los ojos de lágrimas.

¿Y porqué iba a ser yo un español privilegiado, libre de este gran sacrificio de juventud? Y habla en el dolor mi egoísmo cargado de recuerdos, de nostalgias, de evocaciones de niñez, de adolescencia...y ahí se para, porque Manolo era un niño que se aupaba un poco para parecer adolescente. Intentó dejarse la barba por coquetería de combatiente, y no le podía crecer sino a corros...Pero todo es puro egoísmo en el dolor, porque bien considerado, Manolo y sus amigos murieron como ellos querían morir.

Tenían fe, fe en las raices del alma, fe en Dios y fe en España. Se creían ungidos de una misión providencial, y cada uno se consideraba un elegido, como un predestinado...No ambicionaban nada, ni pedían nada, a cambio de su sacrificio y su heroísmo...Han muerto con la mirada en Dios y han ganado el cielo de un salto.

Yo me he pasado treinta años de mi vida escribiendo cada día, y en España y fuera de España no he hecho sino exaltar las virtudes, los hombres, la historia, el arte, la unidad de mi país. Aún hoy, en mi dolor, el oficio me arrastra sobre las cuartillas para amasar la tinta con las lágrimas. ¡Pobre oficio y pobre instrumento la pluma! mi hijo pequeño, a los diez y nueve años, en un solo minuto, ha escrito con su sangre una página que yo no seré capaz de escribir nunca."

Traigo estas hermosas palabras del padre que ha visto derramar la sangre de su hijo por un fin superior, sin resentimientos, en el convencimiento del deber cumplido para alcanzar el más alto ideal, el mismo día que un sujeto le ha montado un sarao a su padre asesino, uno más, y a aquellos que, salidos de todas las cloacas de Europa y América, vinieron a someter a España bajo el yugo de Stalin en ese lupanar, cuyo destino no puede ser otro que ser arrasado hasta los cimientos, que es la Complutense de Madrid.


¡ARRIBA ESPAÑA!

lunes, 17 de octubre de 2011

LAS TROPAS FLECHAS NEGRAS



Las tropas Flechas Negras en la guerra de España es el título del libro que Sandro Piazzoni escribió sobre la Brigada Mixta y después División que tuvo el honor de formar y mandar con voluntarios italianos, falangistas y soldados españoles durante la Guerra Civil española.

El libro fue editado creo que en el año 41 por la editorial Juventud y hoy era prácticamente inencontrable. Afortunadamente, la Editorial Nueva República ha hecho posible que tengamos en las manos el relato en primera persona del artífice y conductor de una de las mejores unidades del bando nacional durante la última contienda civil, poniendo punto final a una búsqueda de años por mi parte sin resultado alguno.

En enero de 1937 se crea la Brigada en Badajoz, tomando como lema "Agredir para vencer". A primeros de marzo la Brigada estaba preparada para entrar en acción. Tras una breve estancia en el frente de Madrid la unidad es trasladada al frente de Vizcaya donde toma parte en la toma de Bilbao, siendo la primera unidad que pone pie en la provincia de Santander, tomando Ontón, laredo, Colindres, Limpias, Santoña, donde tomó 20.000 prisioneros vascos, hasta llegar a Solares, bajo las órdenes del General Dávila.

Desde aquí fue trasladada al frente de Zaragoza, en defensiva, participando después en la Batalla del Ebro, siempre presionando al enemigo, persiguiéndole hasta su derrota. Sin solución de continuidad participa en la campña de Levante, frente de Segorbe y por fin en la Batalla por Cataluña; para ésta última el mando de la División lo había asumido el Coronel Valentín Babini, que anteriormente había mandado el agrupamiento de carros. Para entonces los batallones llevaban los nombres de sus acciones más sonadas, Bermeo, Santoña, Laredo, etc.

Desde Rocco Mammone, primer caído en Badajoz a raíz de un bombardeo, hasta el final de la guerra, los Flechas Negras tuvieron 837 muertos y 4269 heridos obteniendo 3 Medallas de Oro, 152 de Plata, 198 de Bronce, 89 Cruces al Valor Militar, 4 Promociones por Mérito de Guerra, 114 Cruces de Guerra y 582 Cruces Rojas, además de la Medalla Militar Colectiva al 1º Batallón del 1º Regimiento "Monte Jata". Por su parte la División consiguió el siguiente botín de guerra: 53 piezas de artillería, 204 ametralladoras, 384 fusiles ametralladoras, 32985 fusiles, 93 morteros, 14 tanques, 8 autos blindados, 5 aviones, 15 motores de aviación, una enorme cantidad de municiones, víveres y carburantes además de 42.174 prisioneros.

En definitiva, una lectura obligada para comprender en sus justos términos la impagable ayuda que los camaradas fascistas italianos prestaron a España en su Cruzada codo con codo con sus hermanos de armas españoles y que gracias a Nueva República vuelve a ver la luz.

viernes, 14 de octubre de 2011

EL SEPARATISMO SEGUN FRANCISCO DE COSSIO


Francisco de Cossio, hermano de José María de Cossío, además de su obra literaria y periodística fue un buen cronista de la guerra civil. Sin entrar a aportar más datos biográficos, fáciles de encontrar, paso directamente a reproducir lo que este gran autor, tan vinculado a La Montaña, opinaba sobre el nacionalismo y separatismo vasco allá por 1937; pensamientos recogidos en su obra "GUERRA DE SALVACION. Del Frente de Madrid al de Vizcaya."

"...al fin entramos en la ciudad de los Fueros, ya libre del cañón enemigo, pero a la que llegan claros, isóronos los estampidos secos de los "pacos". Por Guernica, lo que ha pasado no es la guerra, sino el terremoto. Es inconcebible esta destrucción que, indudablemente, obedece a una técnica roja, a la que sin duda se prestaron como coadyuvantes los nacionalistas vascos. la casa de los Fueros y el árbol histórico es lo único intacto que ha quedado en Guernica. Penetramos en el parque con la compañía de uno de los Requetés que la guardan. Cualquier caserío de estas montañas y cuaquier roble de estos barrancos tienen más fuerza de historia y tradición que esta casa y este árbol. todo ello con el aspecto de una falsificación de un pastiche mediocre. Frente al nuevo árbol, una ridícula copia del partenón, y el tronco embadurnado de brea también entre columnas griegas de similor. Y en cuanto a la famosa sala de Juntas, la caricatura de un parlamento on un altar al fondo, en el que sonríe una Vírgen de talla, de escuela castellana. Todo eso no tiene sabor de Historia, y así es comprensible que las escenas históricas de este lugar las mixtificase y prostituyese el separatismo. Digámoslo sin rodeos, este lugar que últimamente rindió honores a Prieto y a Companys, parece construido por unos nuevos ricos de la Historia. ¿Qué hubiesen hecho con un castillo como el de Peñafiel y con un Archivo como el de Simancas?
No, la tradición y la historia de un pueblo no puede guardarse en el lugar donde se ha perpetrado una traición. la historia de Vizcaya y de España palpitan juntas en este mar y en este paisaje. Y en estos robles jóvenes que renuevan en estos momentos las viejas empresas de Unidad."

"...El separatismo es cosa nueva, una cosa de ayer. El separatismo es un fenómeno antitradicional que no implica otra cosa sino un pecado de soberbia. No era separatista Vizcaya cuando Don Diego López de Haro, señor de Vizcaya con apellido bien castellano, solicita y recibe de D. Fernando IV de Castilla algunas franquicias para sus mercaderes; no lo era tampoco cuando Doña maría la Buena consigue nuevos privilegios; no lo era cuando en la persona de D. Juan III se une al Reino de Castilla el Señorío de Vizcaya; no lo era tampoco cuando D. Juan II acaba con las disensiones entre las dos ciudades que separa la ría cambiándolas de nombre; ni cuando los vizcainos se suman a las empresas de colonización y conquista...Y así siguen durante toda la historia de España los Fueros, privilegios y mercedes que todos los reyes, sin excepción, conceden a Vizcaya...¿Qué ha pasado aquí? Aquí ha pasado simplemente una ola de vanidad y pedantería. Don Sabino Arana y su escuela estaba constituída por hombres que empezaban por ignorar la historia y aún el idioma de su tierra. Porque el vascuence, hay que confesarlo, no lo hablan sino las clases populares y, en caso, los curas que proceden del pueblo.

Al visitar yo las oficinas de la Presidencia en el Hotel Carlton, observé que todos los documentos, órdenes, propagandas y periódicos, con muy pocas excepciones, estaban redactados en castellano. De tarde en tarde, por despistar, alguna palabra en vasco, pero tan clara que yo mismo la entendía.

Bajando por las escalerillas del puente de Isabel II esta tarde, vi cómo una muchacha hablaba con otra a larga distancia en vasco. Pasó por su lado un falangista y dijo:-Señorita, hay que hablar para que todos nos entendamos- ¡Qué profunda verdad! Hay que hablar para que todos nos entendamos, y los separatistas la misión principal que han cumplido es la de confundir las lenguas y con las lenguas las ideas.

Hay que esperar a que estas gentes de Bilbao salgan de su estupor, y, entonces, yo estoy seguro que se darán cuenta del error en que han vivido, o, aún mejor, del error en que les han tenido. De éstos, de los criminales conductores, se han marchado casi todospero en Bilbao queda aún la enfermedad que ha producido su veneno..."

martes, 11 de octubre de 2011

GODOFREDO ¡PRESENTE!


Acabo de enterarme del fallecimiento de José Sáez Carrasco, conocido popularmente como Godofredo. A pesar de su avanzada edad mostraba una gran energía hasta que una traicionera enfermedad se cebó en su cuerpo no hace mucho tiempo, lo que imposibilitó su presencia en el último 18 de julio y el último aniversario de la Liberación de Santander celebrados en nuestra ciudad. Aún así, la noticia me ha cogido por sorpresa ya que no sabía que su mal estuviese tan avanzado. Aún recuerdo su presencia el pasado 20N en Madrid, como era habitual.

Pepe cargó con la organización de todos los actos patrióticos hasta el final de sus días, esos actos a los que cada vez acudía menos gente, unos por imperativos biológicos y otros porque es más cómodo unirse al rebaño que apartarse de él. Pepe va a reunirse con su amado Caudillo, no me cabe duda, y aquí quedamos el resto para recoger su testigo o para merecer el vilipendio de abandonar una misión sagrada.

Ha querido Dios que su hijo falleciera un 11 de octubre y así recibir cristiana sepultura nada menos que el día de la Hispanidad, el día que se conmemora la Fiesta nacional de su amada España.

JOSE SAEZ CARRASCO ¡PRESENTE!

miércoles, 5 de octubre de 2011

DIEGO MARTINEZ BARRIO: EL GENIO DE LA REPUBLICA


El gran Diego Martínez Barrio, el ministro de casi todo, el presidente de casi todo, el pobre de solemnidad, como vende en sus memorias, con biografías tan bondadosas y edulcoradas como la recogida en la Wikipedia, donde su responsabilidad por acción y colaboración en los distintos gobiernos republicanos, rematado en el criminal gobierno frentepopulista, brilla por su ausencia.
Pero si Don Diego se caracterizó por algo, que a la postre es la clave de toda su actuación contra España y los españoles, fue por haber alcanzado el grado de Gran Maestro del Gran Oriente Español, o sea, masón masonazo; a partir de aquí todo encaja, todo adquiere sentido.
Pero dejando de lado las andanzas de tan siniestro sujeto veamos cómo la irónica prensa falangista retrataba al fulano en 1934:
"¡Martínez Barrio está subiendo!, dicen los parlamentarios en el Congreso, en sus tertulias que frecuentan en el seno de sus respectivas familias.
Pues señor, nadie se había enterado, ni nadie sabe exactamente, por qué esto se está produciendo.
Parece que el señor Martínez Barrio ha pronunciado dos grandes discursos en el Parlamento. ¿Qué ha dicho? pues esto: que había previsto la última intentona del anarco-sindicalista; que hubo más de cien muertos, entre autoridades y revoltosos y que la represión fue muy tibia, muy razonable, con un perfecto conocimiento de lo que es la medida. ¿Es poca cosa dirán ustedes? Bien; Martínez Barrio está subiendo y ya tenemos la segunda revelación de la República. La primera revelación fue, como todo el mundo sabe, el señor Azaña, el de Casas Viejas. No podemos vivir sin una revelación anual, al menos.
Y, esto en las revelaciones sucede por una razón muy sencilla. Ahora, cuando el público ve que sale un político y anda como suelen andar las personas, habla como suelen hablar los hombres, come sopa con la cuchara y es, en una palabra, un hombre como los demás. La gente dice:
-¿Han visto ustedes qué revelación? ¡Es enorme lo que estamos viendo! ¡Qué político! ¡Qué inteligencia, cómo se está haciendo!
-la revelación última, pues sabe incluso dar una conferencia. (Como no ignoran ustedes, en España no se han dado nunca conferencias). Y bien: el señor Martínez Barrio ha dado una conferencia magnífica, que ha sido aplaudidísima.
- ¿Qué ha dicho?
- Pues cosas de este calibre: ¡que la República no ha de destruir, sino de construir! ¡Qué profundidad! ¡Qué buen sentido! ¡pues qué creían ustedes de la agudeza política del señor Barrio? ha dicho, además, que hay que restablecer la confianza, que no pueden hacerse las cosas sin ton ni son y que los partidos han de definirse...Todo esto, como ve el lector, es de una novedad deslumbrante y se ha necesitado la venida al mundo de Don Diego para que se descubriera y pusiera de manifiesto. Algunos elementos que asistían a la conferencia no pudieron contenerse. ¡Qué grande eres, Diego!, dijeron.
Pues así está todo. ¿nos hemos de sorprender? Cuando los creadores de un sistema han tenido que echar mano durante dos años de un hombre como Marcelino Domingo y han llegado a hacer creer al pueblo que era un gran hombre, está, nos parece, todo dicho. Luego nos encontramos que la revelación era Azaña, por aquello de que somos heredo-históricos, que es algo tan funesto como ser heredo-sifilíticos. Y ahora, la revelación se llama don Diego Martínez Barrio, que ha demostrado saber, y así lo ha dicho, que en España hay el poder moderador, el poder legislativo y el poder ejecutivo, y además que la República no ha de destruir sino de construir...
la sensibilidad política ha descendido tanto, está tan abotargado el pueblo español, que un buen día saldrá alguien con algún enorme lugar común bajo el brazo y nos parecerá un genio. Aquel día descubriremos la pólvora sin saberlo y al inventor lo propondremos para la academia de ciencias."